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Mostrando las entradas de septiembre, 2014

Sublime gracia

Philip Yancey Presionado para ingresar a la Marina Real, John Newton fue despedido por insubordinación y se convirtió en traficante de esclavos. Conocido por maldecir y blasfemar, trabajó en un barco de transporte de esclavos durante la época más cruel del comercio transatlántico de esclavos, hasta que, finalmente, llegó a ser capitán. Una conversión dramática en alta mar lo colocó en el sendero de la gracia. Siempre sintió que no merecía la nueva vida que tenía. Se convirtió en un encendido predicador del evangelio y, con el tiempo, líder de un movimiento abolicionista. Newton se presentó ante los congresistas de los Estados Unidos y dio un testimonio presencial irrefutable del horror y la inmoralidad del mercado de esclavos. También es conocido como el autor de la letra de uno de los himnos más amados de todos los tiempos: Sublime gracia. Newton afirmaba que, si tenía algo bueno, se lo debía a la obra de la gracia divina. Al hacerlo, se coloca a la misma altura de estos ...

La reunión final

Joe Stowell Nunca olvidaré la vigilia de sentarme al lado de la cama de mi padre durante sus últimos días con nosotros antes de pasar a la eternidad. Hasta hoy, el momento en que falleció sigue ejerciendo un profundo efecto en mí. Mi papá siempre estaba dispuesto a ayudarme. Podía llamarlo cada vez que necesitaba un consejo. Tengo hermosos recuerdos de nuestros días de pesca juntos: hablábamos de Dios y de la Biblia, y yo le insistía para que contara historias cómicas de su juventud en la granja. Pero, cuando respiró por última vez, tomé conciencia de la irreversibilidad de la muerte. Se había ido de este mundo, y mi corazón tenía un cartel en su puerta que decía: «Vacío». Aun así, en medio de tal pérdida y dolor, la Palabra de Dios habla profundamente a los espacios vacíos. El apóstol Pablo nos enseña que, cuando el Señor Jesús vuelva, los que se hayan ido antes resucitarán primero y que nosotros «seremos arrebatados juntamente con ellos […] y así estaremos siempre co...

La vieja y sabia lechuza

Jennifer Benson Schuldt Hace años, un autor anónimo escribió un breve poema sobre los méritos de medir nuestras palabras: Una vieja y sabia lechuza estaba posada en un roble, / Cuanto más veía, menos hablaba; cuanto menos hablaba, más escuchaba. / ¿Por qué no podemos ser como esa vieja y sabia ave? Hay una conexión entre la sabiduría y el limitar lo que decimos. Proverbios 10:19 declara: «En las muchas palabras no falta pecado; mas el que refrena sus labios es prudente». Somos sabios si cuidamos qué y cuánto decimos en determinadas situaciones. Es importante refrenar nuestras palabras cuando estamos enojados. Santiago exhorta a los creyentes: «… todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse» (Santiago 1:19). Medir lo que decimos también puede mostrar reverencia a Dios. Salomón señaló: «… Dios está en el cielo, y tú sobre la tierra; por tanto, sean pocas tus palabras» (Eclesiastés 5:2). Cuando los demás están angustiados, estar con ellos y en si...

El lenguaje del silvido

Mart de Haan En La Gomera, uno de los islotes de las Islas Canarias, está resurgiendo un idioma que suena como el canto de un pájaro. En una tierra de valles profundos y grandes desfiladeros, los niños en las escuelas y los turistas aprenden sobre los silbidos que, hace tiempo, se usaban para comunicarse a más de tres kilómetros de distancia. Un cuidador de cabras que ha vuelto a usar este antiguo idioma con su rebaño, declaró: «Ellas reconocen mi silbido tanto como mi voz». El silbido también aparece en la Biblia, donde se describe a Dios como un pastor que silba para llamar a sus ovejas. Quizá el profeta tenía en mente esta imagen cuando describió al Señor, quien, un día, silbaría para atraer hacia sí a un pueblo disperso y errante (Zacarías 10:8). Muchos años después, Jesús afirmó: «Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen» (Juan 10:27). Tal vez ese sea el silbido de un pastor. Las ovejas no entienden las palabras, pero conocen el sonido que indica la p...

Urgencia del espíritu

David C. McCasland En marzo del 2011, un devastador maremoto azotó Japón, y se llevó casi 16.000 vidas al arrasar pueblos y aldeas a lo largo de la costa. La escritora y poetisa Gretel Erlich visitó ese país para ser testigo de la destrucción y documentarla. Cuando se sintió incapaz de reportar lo que veía, escribió un poema sobre la situación. Más tarde, en una entrevista, declaró: «Mi viejo amigo William Stafford, un poeta ya fallecido, señalo: “Una poesía es una urgencia del espíritu”». En la Biblia, encontramos que la poesía se utiliza para expresar una emoción profunda, que va desde una alabanza gozosa hasta una pérdida angustiosa. Cuando el rey Saúl y su hijo Jonatán murieron en la batalla, la tristeza abrumó a David (2 Samuel 1:1-12), quien derramó su alma en un poema titulado Cántico del arco: «Saúl y Jonatán, amados y queridos; inseparables en su vida, tampoco en su muerte fueron separados […]. ¡Cómo han caído los valientes en medio de la batalla! […] Angustia teng...

Advertencias repetidas

Dave Branon «Cuidado, la pasarela termina. Cuidado, la pasarela termina». Si alguna vez usaste una pasarela deslizante en un aeropuerto, tal vez hayas oído con frecuencia este anuncio. ¿Por qué los aeropuertos repiten este aviso una y otra vez? Para reforzar la seguridad y evitar la responsabilidad civil si alguien se accidenta. Los anuncios repetidos pueden ser molestos, pero también son importantes. Es más, el apóstol Pablo pensaba que repetir una advertencia era tan vital que así lo hizo en el libro de Gálatas. Pero su declaración era mucho más importante que el peligro de trastabillar en el aeropuerto. Les advirtió que no escucharan ni les creyeran ni a él ni a ningún ángel del cielo si predicaban «otro evangelio» que no fuera el que ya habían oído (1:8). En el versículo siguiente, volvió a decirlo. Valía la pena repetir la advertencia. Los gálatas estaban empezando a creer que la salvación dependía de las buenas obras en lugar de lo que enseñaba el evangelio verda...

San Mateo 20:1-16 "25° domingo del tiempo común"

Hoy la Escritura nos trae unos pasajes bien interesantes a propósito de nuestra relación con Dios y con la comunidad, el A.T. (Ex 16:2-25) nos muestra a un Dios que responde conforme a su propósito y a pesar de la condición misma del ser humano, un Dios que suple y que nos hace entender que no todo tiempo pasado fue mejor, pues si el nos ha llamado a la libertad, fiel es y justo para suplir todo lo que necesitamos aun en el paso por el desierto. A su vez San Pablo nos invita a esforzarnos en la gracia del Evangelio, comprendiendo que hemos sido llamados para comprender la vida desde la visión de Cristo, el Evangelio nos recuerda el gran amor de Dios que nos ha llamado a tiempo y fuera de tiempo para ocuparnos en el trabajo del Reino, es decir en la construcción de una comunidad que sirve y comprende a Dios desde el amir y el servicio y que es consciente que Dios da a cada uno conforme a su propósito y justicia. Recordemos y demos gracias a Dios por enviar el mana del cielo cad...

Ser conocido

Julie Ackerman Link Uno de los conflictos internos más difíciles que tenemos es nuestro deseo de ser conocidos y el temor a que nos conozcan. Como seres creados a la imagen de Dios, somos hechos para ser conocidos, por Él y por los demás. Sin embargo, debido a nuestra naturaleza caída, todos tenemos debilidades y pecados que no queremos que los demás descubran. Usamos la frase «lado oscuro» para referirnos a aspectos de nuestra vida que mantenemos escondidos. También empleamos dichos, tales como «trata de causar una buena impresión», para alentar a otros a revelar su mejor lado. Una de las razones por las que no queremos arriesgar que nos conozcan es el miedo al rechazo y el ridículo. Pero, cuando descubrimos que Dios nos conoce, nos ama y está dispuesto a perdonar aun lo peor que tenemos, el temor a que Él nos conozca empieza a desaparecer. Además, cuando encontramos una comunidad de creyentes que entienden la relación dinámica que hay entre el perdón y la confesión, nos sent...

Contar su historia

Contar su historia Randy Kilgore Cuando el destacado autor Studs Terkel buscaba un tema para su próximo libro, uno de sus amigos le sugirió que escribiera sobre la muerte. Aunque al principio se resistió, la idea fue tomando gradualmente forma, pero su voz se volvió extremadamente real cuando su esposa, con quien había estado casado 60 años, falleció. Entonces, el libro se convirtió en una investigación personal: un ansia de saber qué hay después de la muerte y adónde acababa de ir su amada. Las páginas del libro son un conmovedor recordatorio de nuestra propia búsqueda de Jesús, y de las preguntas y preocupaciones que tenemos sobre la eternidad, mientras recorremos el sendero de la fe. Estoy agradecido por la seguridad que podemos tener de que estaremos con Jesús después de la muerte si hemos confiado en Él para que perdone nuestro pecado. No hay mayor esperanza que esta. Ahora tenemos el privilegio de compartir esta esperanza con todos los que podamos. En 1 Pedro 3:15,...

Dárselo a Dios

Dave Branon Heroína para una generación que creció después de la Segunda Guerra Mundial, Corrie ten Boom dejó un legado de piedad y sabiduría. Víctima de la ocupación nazi en los Países Bajos, sobrevivió para relatar su historia de fe y dependencia de Dios durante su horrendo sufrimiento. «He tenido muchas cosas en las manos —dijo Corrie una vez—, y las perdí todas, pero todo lo que he colocado en las manos de Dios aún lo poseo». Ella sabía muy bien qué significaba perder algo. Perdió su familia, sus posesiones y años de su vida a manos de personas llenas de odio. No obstante, aprendió a concentrarse en lo que podía ganarse en las esferas espiritual y emocional, al colocar todo en las manos de su Padre celestial. ¿Qué significa esto para nosotros? ¿Qué debemos colocar en las manos de Dios para que Él lo proteja? Según la historia del joven rico en Marcos 10, todo. Este hombre tenía gran abundancia en sus manos, pero, cuando Jesús le pidió que lo diera todo, se negó. Se...

Corazón de oración

Anne Cetas Mientras viajaba en un avión con sus hijas de dos y cuatro años, una joven mamá se esforzaba por mantenerlas ocupadas, para que no molestaran a los demás. Cuando se oyó la voz del piloto por el intercomunicador dando los anuncios, la más pequeña dejó lo que estaba haciendo e inclinó la cabeza. Cuando el piloto terminó, ella susurró: «Amén». Como un tiempo antes se había producido una catástrofe natural, quizá la niña pensó que él estaba orando. Tal como esa niñita, yo también deseo tener un corazón que guíe inmediatamente mis pensamientos hacia la oración. Pienso que sería justo decir que el salmista David tenía esa clase de corazón. En el Salmo 27, vemos algunos indicios de esto cuando habla de enfrentar enemigos difíciles (v. 2). También declaró: «Tu rostro buscaré, oh Señor» (v. 8). Algunos dicen que, al escribir este salmo, recordaba el momento cuando huía de Saúl (1 Samuel 21:10) o de su hijo Absalón (2 Samuel 15:13-14). La oración y la dependencia de Dios ...

El juego de la culpa

Marion Stroud Cuando el esposo de Julia la dejó por otra mujer, ella juró que nunca conocería a su nueva esposa. Pero, cuando se dio cuenta de que su amargura perjudicaba la relación de sus hijos con el padre, le pidió al Señor que la ayudara a dar el primer paso para superar ese sentimiento frente a una realidad que ella no podía cambiar. En Génesis 16, leemos la historia de una pareja a quien Dios le prometió un bebé. Cuando Sara le sugirió a Abram que tuviera un hijo con su sierva Agar, estaba perdiendo su confianza en que el Señor cumpliera su promesa. Cuando nació el bebé, Agar despreció a Sara (Génesis 16:3-4) y esta se llenó de amargura (vv. 5-6). De repente, Agar dejó de ser una esclava sin derechos y se convirtió en alguien especial. ¿Cómo reaccionó Sara? Culpó a los demás, incluso a Abram (v. 5). Años después, la promesa de Dios se cumplió con el nacimiento de Isaac. La actitud de Sara también arruinó la celebración de su destete (21:8-10). Probablemente, a S...

San Mateo 18:21-35 "24 Domingo del tiempo común"

El Evangelio de hoy hace un llamado de atención ante la pregunta ¿Cuantas veces debo perdonar a mi hermano? Jesús sale de la norma, de la ley y va mas allá; de siete veces que Pedro justifica, el Señor le dice setenta veces siete, y recuerda el amor y la misericordia que Dios tiene con nosotros y que espera que nosotros tengamos con los demás a través de la parábola de los dos deudores. Una buena pregunta para reflexionar hoy es ¿Qué tanto estoy dispuesto a perdonar? pues el Señor a nosotros nos ha perdonado y nos sigue perdonando de tantas injusticias que a diario cometemos, no obstante, nos hacemos implacables frente al mas débil y San Pablo escribe a los Romanos haciendo un llamado de atención a la reconciliación recordándonos la importancia de no disentir pues somos una comunidad con diferentes formas de pensar. El pensamiento de Pablo y de Cristo esta alineado en la libertad de la expresión para actuar por medio del amor de Cristo, algunos comen otros no, algunos oran en ...

No pienses más en ellos

David H. Roper Mis primeros años de creyente en Cristo estuvieron cargados de presentimientos. Tenía la impresión de que, cuando Jesús volviera, se proyectarían todos mis pecados en una pantalla grande, para que todos los vieran. Ahora sé que Dios prefiere no recordar ni siquiera una de mis transgresiones. Cada pecado ha sido sepultado en el mar más profundo, y nunca volverán a ser exhumados ni examinados. Amy Carmichael escribió: «Hace uno o dos días, pensaba tristemente en el pasado; tantos pecados, fracasos y fallas de todo tipo. Estaba leyendo Isaías 43 y, en el versículo 24, vi: «…me fatigaste con tus maldades». Entonces, por primera vez, noté que no hay ningún espacio entre el versículo 24 y el 25: «Yo, yo soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, y no me acordaré de tus pecados». En realidad, cuando nuestro Señor Jesucristo vuelva, «… aclarará también lo oculto de las tinieblas, y manifestará las intenciones de los corazones; y entonces cada...

El pequeño gigante

Poh Fang Chia El imponente enemigo entra de repente en el valle de Ela. Mide 2,70 metros de altura, y su armadura, hecha de varias planchas pequeñas de bronce, brilla bajo los rayos del sol. La vara de su lanza está envuelta en cordeles, para que gire en el aire y pueda arrojarse más lejos y con suma precisión. Goliat parece invencible. Pero David sabe que no es así. Aunque su adversario parezca un gigante y actúe como tal, comparado con el Dios viviente es pequeño. David tiene una perspectiva correcta del Señor y, en consecuencia, una visión apropiada de las circunstancias. Ve a Goliat como alguien que desafía a los ejércitos del Dios vivo (1 Samuel 17:26). Con confianza, aparece vestido de pastor delante del gigante, y armado tan solo con su cayado, cinco piedras y una honda. Su confianza no está en lo que él es, sino en quien lo acompaña (v. 45). ¿Qué «Goliat» estás enfrentando en este momento? Tal vez sea una situación imposible en el trabajo, una dificultad financiera...

Nacido para rescatar

Dennis Fisher Después del ataque terrorista a las Torres Gemelas en la ciudad de Nueva York, el 11 de septiembre del 2001, Cynthia Otto estuvo a cargo de los perros de búsqueda y rescate. Años después, fundó el Working Dog Center [Centro de perros trabajadores], donde los cachorros se entrenan de manera especial a fin de prepararlos para ayudar a víctimas de tragedias. Otto comentó sobre estos animales de rescate: «Ahora hay muchísimas tareas para las que se usan los perros […], y pueden salvar vidas». También agregó que, algún día, esos cachorros proporcionarán una ayuda vital a las personas en medio de circunstancias amenazadoras. Han «nacido» para rescatar a otros. La Biblia nos habla del Mesías, quien nació para rescatar a la humanidad de la pena del pecado. Lo que Él hizo está más allá de toda comparación terrenal. Hace 2.000 años, Dios tomó forma humana para hacer a nuestro favor lo que nosotros no podíamos llevar a cabo. Cuando Jesús se hizo hombre, entendi...

Una carta asombrosa

Por: Dave Branon De vez en cuando, mi esposa y yo abrimos la correspondencia y encontramos una «carta» sin palabras. Cuando la sacamos del sobre, vemos un trozo de papel que lo único que tiene es una raya de color hecha con un rotulador. Esas «cartas» nos enternecen porque las envía nuestra nieta, de edad preescolar y que vive lejos. Aun sin palabras, esas misivas nos dicen que ella nos ama y que piensa en nosotros. Todos valoramos las cartas de personas que nos aman y a quienes amamos. Por eso, es sumamente alentador que nuestro Padre celestial nos haya dejado una carta llamada Biblia. Su valor va más allá de las expresiones de poder, desafío y sabiduría. Además de todas las historias, enseñanzas e instrucciones, este Libro también transmite la idea fundamental de que Dios nos ama y ha planeado cómo rescatarnos. Nos habla de su amor al supervisar nuestra existencia (Salmo 139), suplir nuestras necesidades (Mateo 6:31-34), consolarnos (2 Corintios 1:3-4) y salvarnos median...

Postura de comadreja

Jennifer Benson Schuldt Las comadrejas son conocidas por su capacidad de hacerse las muertas: el cuerpo se les relaja, les cuelga la lengua y el ritmo cardíaco disminuye. Después de unos 15 minutos, el animal se reaviva. Lo interesante es que los expertos no creen que lo hagan intencionalmente para prevenirse de los depredadores, sino que, de manera involuntaria, ¡se desmayan cuando se sienten abrumadas o ansiosas! Al final de su reinado, Saúl reaccionó de manera similar ante el peligro: «cayó en tierra cuan grande era, y tuvo gran temor por las palabras de Samuel; y estaba sin fuerzas» (1 Samuel 28:20). Lo hizo cuando el profeta Samuel le dijo que los filisteos atacarían Israel al día siguiente, y que Dios no iba a ayudarlos. Como la vida del rey se había caracterizado por la desobediencia, la precipitación y los celos, el Señor ya no lo guiaba (v. 16), y sus esfuerzos por defenderse él mismo y a los israelitas serían inútiles (v. 19). Tal vez nos sintamos débiles y desesp...

Qué siembro?

Por: Julie Ackerman Link La universidad donde estudié tiene una torre adornada con una escultura titulada El Segador. Debajo de la figura, aparece una inscripción tomada de Gálatas 6:7: «Todo lo que el hombre sembrare». La Universidad Estatal de Michigan continúa siendo un baluarte en investigación agrícola; no obstante, a pesar de los numerosos adelantos en las técnicas de labranza y la producción de granos, esta verdad permanece inamovible: las semillas de trigo no producirán frijoles. Jesús empleó muchas metáforas agrícolas para explicar el reino de Dios. En la parábola del sembrador (Marcos 4), comparó la Palabra de Dios con semillas sembradas en diferentes tipos de terreno. Tal como se indica allí, el sembrador siembra de manera indiscriminada, sabiendo que algunas semillas caerán en lugares donde no van a crecer. Al igual que Jesús, debemos sembrar semillas buenas en todo lugar y sin cesar. Dios es responsable de dónde caen y de cómo crecerán. Lo importante es que se...

San Mateo 18:25-20 "23° Domingo del tiempo común"

El Evangelio y las lecturas bíblicas de hoy son una invitación a la reconciliación y la vida en comunidad, frente a las diferencias que podemos tener con nuestros semejantes por diferentes índoles Jesús nos invita a conciliar y reconciliar. Por su parte San Pablo nos exhorta a que nuestra mayor deuda sea la de "amarnos unos a otros" sello del mensaje del Evangelio de Jesús, pues como ya lo hemos dicho el amor cubre multitud de faltas y solo mediante la práctica misma del amor podemos formar y fortalecer la comunidad, el escenario de la pascua es un claro ejemplo de la vida comunitaria y de unión a la que nos llama el Señor y que ha sido confirmado por el Evangelio: "donde hay dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos". El Señor nos ha creado como seres comunitarios y no unitarios y para ello nos ha dado la capacidad de conciliar, reconciliar y perdonar, ganando así a nuestros semejantes. Que el sello de amor del Evangelio sea en ...

Quiero cantar

David C. McCasland Cuando le pregunté a un amigo cómo andaba su madre, me dijo que la demencia senil le había robado su capacidad de recordar muchos nombres y acontecimientos del pasado. «Aun así —agregó—, todavía puede sentarse al piano y, sin la partitura, tocar de memoria himnos hermosos». Hace 2.500 años, Platón y Aristóteles escribieron sobre el poder auxiliador y sanador de la música. Pero, siglos antes, el registro bíblico estaba saturado de canciones. Desde la primera mención de Jubal, «padre de todos los que tocan arpa y flauta» (Génesis 4:21), hasta aquellos que «cantan el cántico de Moisés siervo de Dios, y el cántico del Cordero» (Apocalipsis 15:3), las páginas de la Biblia resuenan de música. Salmos, llamado a menudo «el himnario bíblico», nos señala el amor y la fidelidad de Dios. El libro concluye con un llamado incesante a adorar: «Todo lo que respira alabe al Señor. Aleluya» (Salmo 150:6). Como nunca antes en la historia, hoy necesitamos que Dios minis...

Para siempre con él

Por: Bill Crowder En 1859, durante los turbulentos años previos a la Guerra Civil Estadounidense, el presidente Lincoln tuvo la oportunidad de hablar con los miembros de la Sociedad Agrícola de uno de los estados. En su discurso, compartió con ellos la historia de un antiguo monarca que buscaba una frase que fuera «verdadera y apropiada en todo tiempo y situación». Frente a un desafío tan emocionante, sus sabios consejeros le respondieron con esta frase: «Y esto también pasará». No hay duda de que nuestro mundo está en un constante proceso de deterioro. Y esto no solo le sucede al mundo; nosotros también somos conscientes de que los días de nuestra vida están contados. Santiago escribió: «… Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece» (Santiago 4:14). Aunque nuestra vida actual es efímera y se desvanecerá, el Dios a quien adoramos y servimos es eterno. Él ha compartido esa eternidad con nosotros mediante el...

El león ladrador

Por: Poh Fang Chia Los que visitaban el zoológico quedaron pasmados cuando el «león africano» empezó a ladrar en vez de rugir. El personal del lugar dijo que habían disfrazado un mastín tibetano, un perro muy grande, de león porque no tenían dinero para comprar el animal verdadero. No hace falta decir que el zoológico perdió su reputación y que la gente pensaba dos veces antes de visitarlo. La reputación es frágil; una vez que se daña, es difícil de recuperar. Es común sacrificar una buena reputación en el altar del poder, el prestigio o las posesiones. Podría sucedernos a todos. Las Escrituras nos exhortan: «De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas…» (Proverbios 22:1). Dios está diciéndonos que el valor verdadero no debe basarse en lo que tenemos, sino en lo que somos. El antiguo filósofo griego Sócrates declaró: «La forma de lograr una buena reputación es esforzarse para ser lo que uno desea parecer». Como seguidores de Jesús, llevamos su nombre. Por su am...

Esperanza para seguir

Por: Anne Cetas El aeroplano Solar Impulse, que funciona con energía solar, puede volar día y noche sin combustible. Sus inventores, Bertrand Piccard y André Borschberg, esperan hacerlo volar alrededor del mundo en el 2015. Mientras que el avión vuela durante todo el día con energía solar, reúne suficiente reserva como para seguir haciéndolo toda la noche.«Cuando sale el sol —Piccard señala—, vuelve a traer esperanza para poder continuar». La idea de que el amanecer trae esperanza me hace pensar en Lamentaciones 3, tomado de nuestra lectura bíblica para hoy: «Esto recapacitaré en mi corazón, por lo tanto esperaré. Por la misericordia del Señor no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana…» (vv. 21-23). Aun cuando el pueblo de Dios estaba sumido en la desesperación mientras la ciudad de Jerusalén era invadida por los babilonios, el profeta Jeremías dijo que tenían motivos para mantener la esperanza: todavía permanecían las ...

Ni siquiera un gesto

Por: Randy Kilgore Era una tarde calurosa, el tránsito era terrible y todos estaban de mal humor. Vi un automóvil con dos jóvenes esperando para salir de un restaurante, y pensé que el conductor que estaba delante de mí había tenido una buena actitud al dejarlos pasar. Pero, cuando el conductor «amable» no recibió ni siquiera un gesto de agradecimiento, se enfureció. Primero, bajó la ventanilla y le gritó al otro conductor. Después, aceleró al máximo y avanzó como si fuera a chocarlo por atrás, tocando la bocina y gritando enojado. ¿Quién «fue peor»? ¿La ingratitud del joven conductor justificaba la respuesta airada del conductor «amable»? ¿Le debía un «gracias»? Sin duda, los diez leprosos que Jesús había sanado le debían su gratitud. ¿Cómo es que solamente uno volvió para darle las gracias? Me sorprende la respuesta de Jesús: «¿No hubo quien volviese y diese gloria a Dios sino este extranjero?» (Lucas 17:18). Si el Rey de reyes puede recibir tan solo una de diez resp...

No se olvida de mi

Por: Marion Stroud Esperar resulta siempre difícil; pero, cuando pasan días, semanas y meses sin que nuestras oraciones parezcan tener respuesta, es fácil creer que Dios se ha olvidado de nosotros. Quizá podamos enfrentar el día envueltos en sus distracciones, pero, durante la noche, cuesta el doble luchar contra nuestras ansiedades. Las preocupaciones parecen inmensas y los horas de oscuridad, interminables. El agotamiento hace que parezca imposible enfrentar el nuevo día. El salmista se angustiaba con la espera (Salmo 13:1). Se sentía abandonado, como si sus enemigos estuvieran triunfando (v. 2). Es fácil desanimarse cuando esperamos que Dios resuelva una situación difícil o responda una oración repetida varias veces. Satanás susurra que el Señor nos ha abandonado y que nada cambiará. Tal vez seamos tentados a caer en la desesperación. ¿Para qué molestarnos en leer la Biblia u orar? ¿Para qué esforzarnos para adorar junto con otros creyentes en Cristo? Sin embargo, en la...